Conocé el modelo de negocios que compite con Netflix y los cines pero apunta a millonarios

Mientras que la persona promedio se rompe la cabeza buscando un 2 x 1 para ir al cine, Red Carpet Films espera que los súper ricos consideren gastar U$D 3000 para alquilar películas estreno. El concepto no es completamente nuevo: cobrar a las personas una suscripción ultra premium para ver las películas más nuevas en sus hogares. La idea está siendo impulsada por los empresarios de Hollywood desde hace mucho tiempo y los grandes estudios se sumaron.



Con suscripciones que van desde los  U$D 1500 a U$D 3000, Red Carpet Films permite a los clientes, con un límite de tarjeta de crédito mínimo de U$D 50000, ver películas como Shazam! y Godzilla: Rey de los Monstruos, tan pronto como llegan a los cines.

Los alquileres duran 36 hs y previamente, además de llenar un formulario riguroso, deberán abonar U$D 15000 por un dispositivo que se conecta al proyector del cine en casa (no se olviden de pensar como millonarios). Este dispositivo además, poseé seguridad anti piratería para que los films no sean reproducidos fuera de plazo.

Puede sonar extravagante, pero los fundadores de la compañía lo ven como pagar más por cualquier otro lujo. Red Carpet Films fue iniciada por Fred Rosen, el ex presidente y CEO de Ticketmaster, y Dan Fellman, a quien el New York Times considera el principal experto en distribución de películas de Hollywood. Juntos, han convencido a las divisiones Warner Bros., Paramount, Lionsgate, Annapurna y 20th Century Fox y Fox Searchlight de Disney para que firmen contratos de distribución.

Rosen y Fellman confían en que el modelo funcionará, en parte porque no es una startup que apunta a la interrupción. En 2013, Prima Cinema Player comenzó a ofrecer películas estreno, pero tenía una tarifa de configuración de U$D 35000. Y estudios como Warner Bros. consideraron ofrecer alquileres tempranos de películas por U$D 50 a U$D 300. Incluso Apple jugó con la idea. Pero Rosen y Fellman no están buscando la escala que Apple o Best Buy puedan necesitar.

En cambio, le dijeron al New York Times que, con menos de 4000 clientes, Red Carpet Films aún podría generar ingresos anuales de U$D 300 millones, y dudan que los estudios rechacen entre U$D 25 y U$D 50 millones anuales adicionales. Todo esto, mientras el resto de nosotros peleamos con nuestra suscripción a Netflix. 

En definitiva, el uno por ciento de la población mundial podría tener un nuevo modelo de visualización de películas que realmente funcione.

Fuente: Engadget