La serie de carreras eléctricas Fórmula E registró una pérdida de € 26,4 millones (aproximadamente U$D 29 millones) durante el año fiscal que finalizó el 31 de julio de 2018, a pesar de generar un récord de € 133,4 millones (aproximadamente U$D 149 millones) de ingresos, según un nuevo estado financiero presentado ante Registro de casas de empresas del Reino Unido .
Los resultados del año fiscal Fórmula E informados en esta presentación cubren la cuarta temporada de la serie de carreras, que comenzó a fines de 2017 y terminó con un par de carreras en la ciudad de Nueva York en julio de 2018. La Fórmula E había perdido € 20.8 millones (aproximadamente U$D 23.2 millones) en € 94.5 millones (aproximadamente U$D 105.7 millones) de ingresos en el año anterior. Perdió € 35.2 millones (aproximadamente U$D 39 millones) en ingresos de € 56.6 millones (aproximadamente U$D 63 millones) el año anterior.
La serie de carreras eléctricas, que está supervisada por el mismo órgano de gobierno que la Fórmula Uno, se encuentra actualmente en medio de su quinta temporada. Hay varias razones probables por las que se ha creado un nicho en el abarrotado mundo de los deportes de motor, aunque algunos críticos estimaron que nunca llegaría tan lejos cuando se lanzara en 2014. La serie ha abrazado sus diferencias, como la de operar en temporadas. Circuitos callejeros construidos en o cerca del centro de las principales ciudades.
La Fórmula E también ha incluido a muchos de los principales fabricantes de automóviles del mundo en la serie, incluidos Audi, BMW, Nissan y, próximamente, Mercedes-Benz y Porsche. También se mantienen bajos los costos para esos equipos. Jaguar, por ejemplo, ha invertido al menos 36 millones de euros (unos 40 millones de dólares) en el deporte hasta el momento . (Desde cierta perspectiva, los equipos de Fórmula Uno que ganaron el campeonato han gastado un promedio de alrededor de € 250 millones (alrededor de U$D 280 millones) por temporada en la última década).
Pero no debe pasarse por alto la importancia de la disposición del CEO de Fórmula E, Alejandro Agag, de seguir invirtiendo dinero en la serie mientras opera con pérdidas, todo esto mientras mantiene a la creciente cartera de accionistas contentos. Sumando la pérdida recientemente reportada de € 26.4 millones, la serie ahora ha perdido más de € 150 millones (alrededor de U$D 168 millones) desde su inicio.
En otras palabras, Agag opera básicamente la serie como una empresa nueva de Silicon Valley, y la estrategia parece estar dando sus frutos. La Fórmula E no solo ha atraído a los fabricantes de renombre, la serie más que duplicó su asistencia a 476,000 en la cuarta temporada, y aumentó su audiencia televisiva de 223 millones a 330 millones, de acuerdo con el documento.
Esto fue todo antes de que la Fórmula E presentara su auto de carrera de segunda generación , que es más rápido, más duradero (lo que significa que los conductores no tienen que cambiar de auto a mitad de carrera), y tiene un estilo dramático tan único que no se parece a nada más. la competencia. El nuevo auto debutó en la quinta temporada, que comenzó en diciembre de 2018, y concluye este verano. Hasta ahora, parece que solo ha aumentado el interés en la serie .
En algún momento, es probable que los accionistas de la Fórmula E quieran ver algún tipo de rendimiento de sus muchas inversiones . Pero parecen estar felices por ahora. El año pasado, Agag lanzó una oferta de 600 millones de € (aproximadamente U$D 671 millones de dólares) para tomar el control de la Fórmula E . Pero rápidamente retiró la oferta porque Liberty Media y Discovery Communications, que en conjunto poseen casi el 40 por ciento de la Fórmula E, querían mantener su participación en la serie. "[E] son inversores a largo plazo en Fórmula E" , dijo a Autosport en septiembre pasado. "Ellos creen en el futuro del campeonato y quieren que sigamos trabajando juntos y no quieren vender".
Mientras tanto, Agag está encontrando claramente nuevas fuentes de ingresos que podrían ayudar eventualmente a sacar la serie de la roja. Mientras que los "ingresos relacionados con la raza y el servicio" se mantuvieron estables en gran medida en comparación con el año anterior, la serie experimentó un enorme aumento de 42 millones de euros (unos 47 millones de dólares) en las "promociones de carreras y los ingresos por licencias". Alrededor de 12 millones de euros provinieron de la corporación sueca ABB , que se convirtió en patrocinador principal el año pasado. La Fórmula E también firmó varios acuerdos de patrocinio más pequeños con marcas de renombre como Heineken y Bosch durante este período de tiempo.
Pero una gran parte del aumento en los ingresos también provino de Arabia Saudita. En mayo pasado, la Fórmula E firmó un acuerdo de 10 años con el Reino para organizar carreras allí . El valor de ese acuerdo, que no se informó anteriormente, es de alrededor de U$D 260 millones distribuidos en los 10 años, según una persona con conocimiento del acuerdo.
Fuente: The Verge
Los resultados del año fiscal Fórmula E informados en esta presentación cubren la cuarta temporada de la serie de carreras, que comenzó a fines de 2017 y terminó con un par de carreras en la ciudad de Nueva York en julio de 2018. La Fórmula E había perdido € 20.8 millones (aproximadamente U$D 23.2 millones) en € 94.5 millones (aproximadamente U$D 105.7 millones) de ingresos en el año anterior. Perdió € 35.2 millones (aproximadamente U$D 39 millones) en ingresos de € 56.6 millones (aproximadamente U$D 63 millones) el año anterior.
La serie de carreras eléctricas, que está supervisada por el mismo órgano de gobierno que la Fórmula Uno, se encuentra actualmente en medio de su quinta temporada. Hay varias razones probables por las que se ha creado un nicho en el abarrotado mundo de los deportes de motor, aunque algunos críticos estimaron que nunca llegaría tan lejos cuando se lanzara en 2014. La serie ha abrazado sus diferencias, como la de operar en temporadas. Circuitos callejeros construidos en o cerca del centro de las principales ciudades.
La Fórmula E también ha incluido a muchos de los principales fabricantes de automóviles del mundo en la serie, incluidos Audi, BMW, Nissan y, próximamente, Mercedes-Benz y Porsche. También se mantienen bajos los costos para esos equipos. Jaguar, por ejemplo, ha invertido al menos 36 millones de euros (unos 40 millones de dólares) en el deporte hasta el momento . (Desde cierta perspectiva, los equipos de Fórmula Uno que ganaron el campeonato han gastado un promedio de alrededor de € 250 millones (alrededor de U$D 280 millones) por temporada en la última década).
Pero no debe pasarse por alto la importancia de la disposición del CEO de Fórmula E, Alejandro Agag, de seguir invirtiendo dinero en la serie mientras opera con pérdidas, todo esto mientras mantiene a la creciente cartera de accionistas contentos. Sumando la pérdida recientemente reportada de € 26.4 millones, la serie ahora ha perdido más de € 150 millones (alrededor de U$D 168 millones) desde su inicio.
En otras palabras, Agag opera básicamente la serie como una empresa nueva de Silicon Valley, y la estrategia parece estar dando sus frutos. La Fórmula E no solo ha atraído a los fabricantes de renombre, la serie más que duplicó su asistencia a 476,000 en la cuarta temporada, y aumentó su audiencia televisiva de 223 millones a 330 millones, de acuerdo con el documento.
Esto fue todo antes de que la Fórmula E presentara su auto de carrera de segunda generación , que es más rápido, más duradero (lo que significa que los conductores no tienen que cambiar de auto a mitad de carrera), y tiene un estilo dramático tan único que no se parece a nada más. la competencia. El nuevo auto debutó en la quinta temporada, que comenzó en diciembre de 2018, y concluye este verano. Hasta ahora, parece que solo ha aumentado el interés en la serie .
En algún momento, es probable que los accionistas de la Fórmula E quieran ver algún tipo de rendimiento de sus muchas inversiones . Pero parecen estar felices por ahora. El año pasado, Agag lanzó una oferta de 600 millones de € (aproximadamente U$D 671 millones de dólares) para tomar el control de la Fórmula E . Pero rápidamente retiró la oferta porque Liberty Media y Discovery Communications, que en conjunto poseen casi el 40 por ciento de la Fórmula E, querían mantener su participación en la serie. "[E] son inversores a largo plazo en Fórmula E" , dijo a Autosport en septiembre pasado. "Ellos creen en el futuro del campeonato y quieren que sigamos trabajando juntos y no quieren vender".
Mientras tanto, Agag está encontrando claramente nuevas fuentes de ingresos que podrían ayudar eventualmente a sacar la serie de la roja. Mientras que los "ingresos relacionados con la raza y el servicio" se mantuvieron estables en gran medida en comparación con el año anterior, la serie experimentó un enorme aumento de 42 millones de euros (unos 47 millones de dólares) en las "promociones de carreras y los ingresos por licencias". Alrededor de 12 millones de euros provinieron de la corporación sueca ABB , que se convirtió en patrocinador principal el año pasado. La Fórmula E también firmó varios acuerdos de patrocinio más pequeños con marcas de renombre como Heineken y Bosch durante este período de tiempo.
Pero una gran parte del aumento en los ingresos también provino de Arabia Saudita. En mayo pasado, la Fórmula E firmó un acuerdo de 10 años con el Reino para organizar carreras allí . El valor de ese acuerdo, que no se informó anteriormente, es de alrededor de U$D 260 millones distribuidos en los 10 años, según una persona con conocimiento del acuerdo.
Fuente: The Verge