El número de mujeres que alegan que Lyft no ha hecho lo suficiente para detener las agresiones sexuales de sus conductores está creciendo. Veinte mujeres más se unieron a una demanda el miércoles 4 de diciembre, alegando que fueron agredidas, secuestradas y violadas mientras usaban el servicio de transporte de la compañía. Eso significa que más de 50 mujeres han presentado o se han unido a demandas contra Lyft desde agosto de 2019.
La más reciente demanda fue presentada el miércoles en el Tribunal Superior de San Francisco por Mike Bomberger, de la firma de abogados Estey y Bomberger. El abogado también representa a otras 14 mujeres en una demanda separada en contra de Lyft. Otra abogada, Rachel Abrams, de Levin Simes Abrams, también ha presentado 19 demandas contra Lyft por acusaciones similares.
Los abogados de las víctimas dicen que Lyft no ha hecho lo suficiente para proteger de una agresión sexual a los pasajeros y que los autores se sienten atraídos por Lyft para aprovecharse de las mujeres vulnerables. Las demandas afirman que Lyft realiza mediocres verificaciones de antecedentes de los conductores y, a menudo, no los desactiva de la plataforma después de acusaciones de agresión sexual. Las demandas también aseguran que Lyft tiende a obstruir a las víctimas, ignorando, desestimando o minimizando sus afirmaciones y acusaciones.
Por su parte, Lyft dice que se está centrando en la seguridad. John Zimmer, presidente de la compañía, publicó en septiembre una entrada de blog titulada "Reforzar nuestro compromiso con la seguridad", diciendo que Lyft lanzó varias funciones de seguridad nuevas durante el año pasado. Estas incluyen verificaciones continuas de antecedentes y un botón de emergencia 911 en la aplicación. Asimismo, Lyft acaba de iniciar un curso obligatorio de "educación de seguridad comunitaria" para todos los conductores.
Después de Uber, Lyft es el segundo servicio de transporte de pasajeros más grande del país. La compañía, fundada hace 7 años, dice que tiene más de 2 millones de conductores y 30 millones de pasajeros en todo Estados Unidos y Canadá. Con operaciones en los 50 estados del país, coordina millones de viajes a diario.
Lyft y Uber no han publicado datos sobre cuántas agresiones están vinculadas a sus conductores, y se han negado a decir cuántas demandas de agresión sexual se han presentado contra ellas. Pero según los abogados que representan a las víctimas, esas cifras son elevadas.
Bomberger asegura que recibe al menos tres llamadas al día de mujeres que dicen que fueron agredidas por conductores. Y Abrams dice que su firma ahora representa a más de 70 mujeres que dicen haber sido agredidas sexualmente por conductores de Lyft.
Tanto Abrams como Bomberger dicen recibir el mismo número, si no es que más, de llamadas sobre mujeres presuntamente atacadas por conductores de Uber. Pero, afirman, Uber tiene un mejor historial de trabajo con las víctimas y, por lo tanto, enfrenta menos demandas.
Las mujeres en la demanda más reciente detallan incidentes en los que se quedaron dormidas en el asiento trasero solo para encontrar a su conductor Lyft encima de ellas. Muchas de las mujeres dicen que tomaron medidas drásticas para detener a los conductores de los presuntos ataques. Una mujer dijo que le dijo al conductor que tenía VIH, otra dijo que orinó para que el conductor se detuviera. Los abogados de las víctimas dicen que muchas de estas agresiones sexuales ocurrieron después de que Lyft fuera demandada a principios de septiembre.
Fuente: Cnet
La más reciente demanda fue presentada el miércoles en el Tribunal Superior de San Francisco por Mike Bomberger, de la firma de abogados Estey y Bomberger. El abogado también representa a otras 14 mujeres en una demanda separada en contra de Lyft. Otra abogada, Rachel Abrams, de Levin Simes Abrams, también ha presentado 19 demandas contra Lyft por acusaciones similares.
Los abogados de las víctimas dicen que Lyft no ha hecho lo suficiente para proteger de una agresión sexual a los pasajeros y que los autores se sienten atraídos por Lyft para aprovecharse de las mujeres vulnerables. Las demandas afirman que Lyft realiza mediocres verificaciones de antecedentes de los conductores y, a menudo, no los desactiva de la plataforma después de acusaciones de agresión sexual. Las demandas también aseguran que Lyft tiende a obstruir a las víctimas, ignorando, desestimando o minimizando sus afirmaciones y acusaciones.
Por su parte, Lyft dice que se está centrando en la seguridad. John Zimmer, presidente de la compañía, publicó en septiembre una entrada de blog titulada "Reforzar nuestro compromiso con la seguridad", diciendo que Lyft lanzó varias funciones de seguridad nuevas durante el año pasado. Estas incluyen verificaciones continuas de antecedentes y un botón de emergencia 911 en la aplicación. Asimismo, Lyft acaba de iniciar un curso obligatorio de "educación de seguridad comunitaria" para todos los conductores.
Después de Uber, Lyft es el segundo servicio de transporte de pasajeros más grande del país. La compañía, fundada hace 7 años, dice que tiene más de 2 millones de conductores y 30 millones de pasajeros en todo Estados Unidos y Canadá. Con operaciones en los 50 estados del país, coordina millones de viajes a diario.
Lyft y Uber no han publicado datos sobre cuántas agresiones están vinculadas a sus conductores, y se han negado a decir cuántas demandas de agresión sexual se han presentado contra ellas. Pero según los abogados que representan a las víctimas, esas cifras son elevadas.
Bomberger asegura que recibe al menos tres llamadas al día de mujeres que dicen que fueron agredidas por conductores. Y Abrams dice que su firma ahora representa a más de 70 mujeres que dicen haber sido agredidas sexualmente por conductores de Lyft.
Tanto Abrams como Bomberger dicen recibir el mismo número, si no es que más, de llamadas sobre mujeres presuntamente atacadas por conductores de Uber. Pero, afirman, Uber tiene un mejor historial de trabajo con las víctimas y, por lo tanto, enfrenta menos demandas.
Las mujeres en la demanda más reciente detallan incidentes en los que se quedaron dormidas en el asiento trasero solo para encontrar a su conductor Lyft encima de ellas. Muchas de las mujeres dicen que tomaron medidas drásticas para detener a los conductores de los presuntos ataques. Una mujer dijo que le dijo al conductor que tenía VIH, otra dijo que orinó para que el conductor se detuviera. Los abogados de las víctimas dicen que muchas de estas agresiones sexuales ocurrieron después de que Lyft fuera demandada a principios de septiembre.
Fuente: Cnet
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